El arbitraje desquició al madridismo; Muñiz se inventó el acta para perjudicar al Real Madrid.
El Real Madrid vuelve a ser protagonista de una controversia arbitral, no solo por las decisiones tomadas durante el partido, sino por lo ocurrido tras el mismo. El colegiado Alejandro Muñiz Ruiz mostró una tarjeta amarilla a Fede Valverde en el minuto 4 del encuentro, alegando en el acta arbitral que fue por «hacer un gesto de desaprobación» hacia él. Sin embargo, lo más preocupante es que el árbitro faltó a la verdad en su redacción del acta.
La secuencia de la tarjeta a Valverde
El incidente ocurrió cuando Valverde, tras cometer una falta en el centro del campo, hizo un pequeño gesto con el brazo en señal de desaprobación. Sin embargo, en ningún momento se dirigió al árbitro ni lo miró. Muñiz Ruiz llamó al jugador uruguayo, pero este no se dio cuenta, lo que llevó al colegiado a pensar que Valverde lo estaba ignorando deliberadamente y decidió amonestarlo.
En el acta arbitral, Muñiz Ruiz escribió que el jugador fue amonestado «por hacer un gesto de desaprobación hacia mi persona», lo cual no es exacto, ya que Valverde en ningún momento lo miró ni hizo el gesto de manera directa hacia el árbitro.
Desigualdad en las sanciones
Este tipo de gestos, comunes en cada partido, raramente son castigados con tarjetas amarillas, lo que pone de manifiesto un trato diferencial hacia los jugadores del Real Madrid. Parece que los futbolistas blancos están siendo penalizados de manera desproporcionada, mientras que otros equipos parecen tener un margen mucho mayor para realizar gestos o protestas sin sufrir las mismas consecuencias.
Muñiz Ruiz no fue el único árbitro cuestionado por decisiones polémicas en esta temporada, pero lo que agrava el caso es la supuesta falta de veracidad en la redacción del acta. El Madrid solo cometió 5 faltas, pero recibió 6 tarjetas amarillas, mientras que el Alavés, con 10 faltas, se fue sin ninguna amonestación.
El entrenador Carlo Ancelotti ya había comentado, con ironía en rueda de prensa, que «tendremos que aprender a no protestar, porque cada vez que hablamos, nos muestran tarjeta amarilla». La situación se agrava cuando incluso el capitán del equipo, Luka Modric, fue amonestado pese a cumplir la norma de dirigirse al árbitro con el brazalete de capitán.
Estas decisiones alimentan el creciente malestar en el Real Madrid, que siente que está siendo tratado de manera injusta en los últimos años. Los aficionados y el club consideran que los arbitrajes están afectando negativamente su rendimiento en La Liga, donde parece más difícil competir en igualdad de condiciones.
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