El Comité de Competición dio por buena la reclamación del Real Betis para que Antony pueda jugar el partido de este sábado (18:30 horas) frente al Real Madrid. Los verdiblancos quisieron apelar, al igual que los merengues, pero en el caso de Bellingham se obtuvo una respuesta totalmente distinta.
La expulsión de Antony que le deja sin jugar contra el Real Madrid.#LALIGAEASPORTS #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/VJYmpYKrsI
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) February 23, 2025
En la Liga Española se ha desatado un nuevo polémico episodio. Antony, jugador brasileño del Betis, podrá jugar contra el Real Madrid el próximo sábado en el Benito Villamarín. El Comité de Competición ha decidido anular la tarjeta roja que le mostraron el domingo pasado en el partido contra el Getafe.
Durante esos últimos minutos, Antony realizó una entrada dura y el árbitro le mostró la cartulina roja, lo que, en principio, le habría inhabilitado para disputar el encuentro frente al equipo blanco.
Posteriormente, el técnico verdiblanco, Manuel Pellegrini, manifestó que recurrirían la tarjeta roja de Antony, ya que, a pesar de lo aparatosa de la entrada, apenas rozó al jugador del Getafe. Incluso este martes, Antony expresó que tenía muchas ganas de jugar contra el Real Madrid y se mostró muy esperanzado de que se le retirara la sanción.
Finalmente, tras revisar el recurso y el video enviado por el club verdiblanco, el Comité de Competición decidió quitarle la sanción al delantero brasileño, lo que ha provocado nuevamente el debate sobre la aplicación de criterios arbitrales.
Polémica por el doble rasero del CTA
Sin embargo, el escándalo no se limita a la decisión sobre Antony. En otro caso reciente, el Real Madrid recurrió la expulsión de Bellingham en el Sadar frente a Osasuna. Según los informes, el árbitro Munuera Montero expulsó al jugador inglés por insultarle en el acta, alegando que Bellingham se dirigió a él diciendo «f*** you», cuando en realidad el inglés habría dicho «f*** off».
El Real Madrid presentó un recurso acompañado de imágenes en las que se mostraba claramente que Bellingham en ningún momento insultó al árbitro. A pesar de todas las pruebas aportadas por el club blanco, el comité de competición decidió no anular la tarjeta roja y Bellingham tendrá que cumplir los dos partidos de sanción que le impusieron.
Ante estas decisiones, el Real Madrid ha expresado su malestar y ha enviado una carta a la RFEF y al CSD, reclamando que se revise y se cambie todo el estamento arbitral. Según sus argumentos, se evidencia que al Madrid se le aplican reglas diferentes a las de los demás clubes, lo que hace imposible competir en igualdad de condiciones. Esta situación ha encendido nuevamente la crítica hacia la gestión arbitral en la liga.
Cada día que pasa, este asunto parece empeorar. Muchos opinan que la Liga, desde hace tiempo, ha perdido todo su prestigio y credibilidad, y que hasta que no se cambie de arriba a abajo el estamento arbitral, seguirá siendo la «vergüenza de Europa».
La percepción de un doble rasero en la aplicación de las sanciones es uno de los puntos más controversiales y genera un fuerte sentimiento de injusticia entre los clubes y aficionados.
