El Real Madrid necesitaba imperiosamente sacar los tres puntos en todo lo que queda de LaLiga. Los blancos, obligados a ir a remolque tras situarse a 7 puntos de desventaja por el Clásico, apuraban opciones por si se daba el milagro (el mayor de los milagros) de ver tres pinchazos seguidos del FC Barcelona.

Antes de mirar los intereses del rival tocaba hacer los deberes en casa contra el Mallorca y el partido empezó muy mal, bien con un gol de Valjent tras una jugada en la que Bellingham y Ceballos estuvieron desafortunados en el marcaje y el central puso el 0-1 con facilidad.

En el minuto 68 de partido llegó el empate del Real Madrid. Gol de Mbappé, en una bonita jugada personal, para igualar la contienda y levantar los ánimos del madridismo, además de dispararse hasta los 28 goles en la pelea por ganar el Pichichi, aunque no sería suficiente en ninguno de los casos ya que el FC Barcelona es matemáticamente campeón de Liga.

Jacobo Ramón, cuando el Barça ya era campeón y Laporta tenía en la mano la botella de champagne para descorcharla, marcó un gol salvador que aviva de nuevo el campeonato. A la espera del Espanyol-Barça, los de Hansi Flick no pueden cantar el alirón.

Share.

Periodista deportivo con más de 10 años de experiencia en redacción de artículos online. Llevando la dirección de varias páginas. También con experiencia narrando partidos de fútbol en varias emisoras de radio y cubriendo eventos en directo.

Comments are closed.