Que el encuentro entre el Real Madrid y el Salzburgo en el tercer partido de la fase de grupos del Mundial de Clubes fue la primera demostración de la semilla de Xabi Alonso en el Real Madrid, es un hecho. Un encuentro en el que el conjunto blanco solo recibió buenas noticias, en una primera demostración de todo lo que está por venir.
A nivel colectivo, el encuentro fue uno de los mejores partidos disputados por el conjunto blanco en los últimos meses. Sin embargo, haciendo hincapié en casos individuales, Vini fue una de las mejores noticias del Real Madrid. Y es que el futbolista brasileño demostró en el encuentro lo que ha venido demostrando durante los últimos años: que es uno de los pilares del Real Madrid.
Vinícius recupera la sonrisa con Xabi
Y es que Vinícius firmó una auténtica exhibición contra el conjunto austriaco, precisamente el mismo equipo con el que el ‘7’ firmó una de sus mejores actuaciones la pasada temporada. Y no solo por su golazo y por su asistencia, en la que se disfrazó de Guti con un detalle de crack mundial. Más allá de lo visible y de la brillantez demostrada sobre el verde, Vini demostró un gran cambio.
No en la actitud, ya que es algo que nunca se le ha podido reprochar al brasileño, ya salieran o no las cosas, su actitud sobre el verde ha sido impecable en los momentos buenos y en los malos. Sin embargo, sí es cierto que durante los últimos meses, Vini parecía haber perdido la alegría que caracteriza a su fútbol, y que le ha llevado a convertirse en uno de los mejores jugadores del mundo.

Un futbolista que basa su peligro en la potencia, el desborde y una constante amenaza a la zaga rival. Pero durante los últimos meses, Vini no lograba encontrar la forma de sacar brillo a su fútbol. Por momentos, parecía haber perdido esa frescura que siempre lo había caracterizado. Pero nada más lejos de la realidad, tal y como el brasileño demostró ante el Salzburgo.
Xabi da en la tecla con Vini… y la renovación está al caer
Un cambio de signo del que Xabi Alonso tiene gran parte de culpa. Desde su llegada al banquillo blanco, el técnico tolosarra dejó claro que Vini sería uno de los estandartes de su Real Madrid. Y, por el momento, así ha sido, ya que el brasileño se ha constatado como la principal referencia ofensiva del conjunto blanco, a expensas del próximo regreso de Kylian Mbappé.
Y en el encuentro ante el Salzburgo, Vinícius brilló por el centro, alejado de la banda izquierda de la que ha sido dueño durante las últimas temporadas. Un perfil en el que Vini demostró que puede ser muy dañino para las zagas rivales, rompiendo por el carril central con desmarques de ruptura, tal y como hizo en su tanto y en el que le regaló a Valverde, demostrando una vez más una enorme versatilidad a la hora de ocupar el flanco de ataque.
Un buen momento que, además, irá acompañado de una noticia clave para el futuro del Real Madrid: la renovación de Vini. Una renovación que ha venido cocinándose durante los últimos meses, y que a falta del anuncio oficial, está sellada hasta junio de 2030. Y lo está desde el pasado mes de marzo. Una noticia que demuestra lo que el brasileño ha repetido hasta la saciedad: quiere retirarse en el Real Madrid. Y de momento, va camino de conseguirlo.