Ya es oficial: Endrick y Gonzalo serán los ‘9’ del Real Madrid la próxima temporada. Una noticia que, hasta hace poco más de dos meses, parecía impensable. En el imaginario colectivo, Endrick sería el gran candidato a ocupar la delantera blanca.  Sin embargo, la sucesión de exhibiciones de Gonzalo en el Mundial de Clubes cambió la hoja de ruta blanca.

Una situación que deja al conjunto blanco ante un panorama que no se ve desde hace muchos años en La Casa Blanca. Y es que desde 2013, Karim Benzema ha sido el único gran ‘9’ del conjunto blanco. Entre tiempos de Karim, pasaron otros nombres que se ganaron el cariño de la afición, como fueron Chicharito o Morata, pero todos ellos partían con el cartel de suplente por detrás del francés.

El Real Madrid vuelve a tener dos ‘9’ mucho tiempo después

Y justo cuando el francés decidió decir adiós a la que fue su casa durante 14 temporadas, y muchos pensaban que el conjunto blanco se quedaría sin una referencia arriba, llegó Joselu. Un Joselu que se metió al madridismo en el bolsillo, no solo por los 18 goles que anotó sin ser una pieza insustituible en el esquema blanco, sino por el madridismo insaciable del que hizo gala desde el minuto uno.

Y como su fuera uno de esos amores efímeros de verano, Joselu se fue solo un año después de llegar, dejando huérfano al madridismo. Un madridismo que, sin embargo, poco después recibiría la llegada de Endrick, en el que había puestas muchas esperanzas. Sin embargo, la primera temporada de Endrick ha sido complicada, marcada por la falta de minutos que tuvo con Carletto.

Cuando parecía que ahora, por fin, con Xab en el banquillo, era la temporada de Endrick, aparece Gonzalo. Una situación que no deja fuera a Endrick, ni mucho menos, pero sí que deja al conjunto blanco en un panorama que no se vivía desde hace muchos años: el Real Madrid vuelve a tener dos ‘9’ muchos años después.

Es cierto que las comparaciones son odiosas, sí, pero es inevitable echar la vista atrás y acordarse de una pareja concreta: Gonzalo Higuaín y Karim Benzema. Es cierto que Benzema tuvo otros competidores durante su amplia carrera de blanco, pero en su competencia con el argentino, el Real Madrid protagonizó una encarnizada batalla por la titularidad en la punta de ataque.

Muchos posiblemente recordarán la rueda de prensa de José Mourinho en la que dijo aquello de “si no tienes perro, sales a cazar con un gato”. Es indudable que el portugués supo sacar lo mejor de sus dos delanteros. Y es que Karim llegó a un Real Madrid en el que Higuaín era una de las principales referencias ofensivas. Y así quedó demostrado en su primera temporada: por los 27 goles del argentino, el francés solo marcó 9.

Sin embargo, llegó Mourinho y la cosa cambió. En la temporada 2010/11, Benzema marcó 26 goles en 48 partidos, por los 33 goles en 54 partidos de Higuaín. Las cifras seguían siendo favorables al argentino, pero el francés empezaba a dejar pistas sobre el gran delantero que iba a ser. La temporada siguiente, El Gato dio la vuelta a las tornas, y se impuso con 32 goles en 52 partidos por los 26 goles en 54 partidos de Higuaín.

Y en su tercera y última temporada juntos, las 12/13, la competencia entre ambos volvió a ser feroz: 20 goles en 50 partidos para Benzema, y 18 goles en 44 partidos para Higuain. Hasta ahí llegó la rivalidad entre dos delanteros que compartieron vestuario durante tres temporadas en las que no solo compitieron, sino que se retroalimentaron y mejoraron al otro. Solo hace falta remitirse a la escandalosa cifra que ambos sumaron siendo competencia en solo 3 temporadas: 155 goles.

Ahora, por primera vez desde hace ya doce años, dos delanteros con capacidades para comerse el mundo volverán a competir por un hueco en el once inicial. Un debate en el que muchos ven un conflicto. Sin embargo, donde muchos ven un problema, basta con echar la mirada atrás para ver solo ventajas. Y si Xabi Alonso quiere saber cómo gestionarlo… basta con telefonear a uno de sus grandes mentores.

Share.

Periodista deportivo que cubre la actualidad del Real Madrid.

Comments are closed.