Poco más de 24 horas han pasado desde que Franco Mastantuono se enfundase por primera vez la camiseta del Real Madrid en el mismo día de su décimo octavo cumpleaños. El día más especial de su hasta ahora corta carrera, en el que la mayor joya del fútbol argentino ha cambiado el blanco de River Plate por el blanco del Real Madrid.
Un punto especialmente importante, pues Real Madrid y River tienen muchas cosas en común. Desde hace ya muchas décadas, ambos clubes están unidos por una hermandad que traspasa las barreras delimitadas por el Océano Atlántico. Y la llegada de Mastantuono al Real Madrid es el enésimo ejemplo de una hermandad deportiva que ha dado lugar a algunos de los eventos más importantes de la historia del fútbol.
Mastantuono, el último de un largo vínculo entre Real Madrid y River
Asimismo lo reconoció Florentino Pérez durante la rueda de prensa de presentación de la joven perla argentina: “Quiero tener una mención especial para River Plate, un club centenario, legendario y uno de los más laureados de Argentina y de América. Sentimos admiración y orgullo”.
Unas palabras que tocaron profundamente a Jorge Brito, presidente de River, que no tardó en corresponder al afecto del presidente del Real Madrid en sus redes sociales: “Muchas gracias por tus palabras Florentino, el Real Madrid es un club con el que compartimos no solo una historia deportiva, sino también una relación entrañable, construida sobre el respeto mutuo, la grandeza y valores que trascienden generaciones”.
Una relación que, más allá de los valores en común entre ambos clubes, ha jugado un papel fundamental en el devenir de la perla argentina. Es un hecho que el futbolista sólo quería jugar en el Madrid, pero la falta de una llamada hizo que los contactos con el PSG dejasen la operación prácticamente cerrada. Sin embargo, cuando en París ya preparaban todos los aspectos contractuales, el Real Madrid descolgó el teléfono y ahí terminó la historia: con Mastantuono posando delante de las 15 Copas de Europa que adornan las vitrinas del Santiago Bernabéu.
Son muchos los aspectos que, históricamente, han unido al Real Madrid y a River Plate. Comenzando por la primera vez de River en Chamartín allá por 1951, y siguiendo por la presencia del club argentino en el homenaje que el conjunto blanco realizó a Paco Gento en 1965, siendo una hermandad que cuenta con casi 75 años. Recientemente, otros episodios como la conquista de la cuarta Libertadores de River, que se dio precisamente en el Santiago Bernabéu en 2018, y que fue otro de los capítulos que reforzó esa hermandad entre clubes.

Pero más allá de esos valores y gestos en común entre ambos equipos, los futbolistas en común han sido otro de los puntos que ha fortalecido esta relación con el paso de los años. Y es que durante estas casi ocho décadas, grandes futbolistas han lucido con orgullo ambos escudos a lo largo de su carrera. Mastantuono es el último de una lista en la que hacen acto de presencia nombres como Higuaín, Ruggeri o Solari, quien precisamente ha jugado un papel clave en la llegada de Mastantuono a La Casa Blanca.
Sin embargo, en esa lista que ya suma quince futbolistas, Don Alfredo Di Stéfano es la gran referencia. Uno de los dos futbolistas más importantes de la historia del Real Madrid, donde ganó cinco Champions League consecutivas, ocho Ligas y dos Balones de Oro, que le sirvieron para coronarse como el mejor futbolista del siglo XX, tras tocar el cielo de Madrid después de haberse formado en las categorías inferiores de River.
Es un hecho que es una tarea imposible para Mastantuono igualar el legado de La Saeta Rubia. A pesar de que la gran perla del fútbol argentino ha aterrizado en el Real Madrid con 17 años, 10 menos de los que tenía Don Alfredo cuando llegó al club, el legado de Di Stéfano debe ser más un ejemplo a seguir que un objetivo a alcanzar. Lo que sí es seguro es que, allá donde este, Don Alfredo estará orgulloso de volver a ver a uno de los suyos vestir con orgullo ese escudo redondito con tantas Copas de Europa. Y eso, teniendo en cuenta de dónde viene la joven perla del Real Madrid, es decir mucho.