El Estadi Johan Cruyff acogió un partido de Liga clásico entre Barça y Valencia este domingo. Los azulgranas, saltándose la ley una y otra vez, pudieron jugar el encuentro liguero en un recinto de poco más de 6.000 espectadores y lo hicieron contra los che – que apenas protestaron -, con el objetivo de seguir la persecución al Real Madrid.
Sin olvidar la polémica, una vez más, pero en el primer tiempo fue el FC Barcelona quién dominó el encuentro y jugó plácidamente contra un Valencia que apenas sabía pasar del centro del campo. El gol parecía cuestión de tiempo y llegó en el minuto 29 por medio de Fermín.
No hay que pasar por alto que, previamente, en el minuto 7 de encuentro, los de Hansi Flick debían jugar con 10 futbolistas por la roja perdonada a Eric García que calcó la acción defensiva de Huijsen siendo el último hombre y derribando a Hugo Duro, tal y como hizo el madridista en el Reale Arena con Oyarzabal.
Y todo fue cuesta abajo con un Valencia flojísimo que empezó a encajar goles y no opuso resistencia sobre el terreno de juego. Raphinha, Fermín y Lewandowski marcaron el 2-0, 3-0. 4-0, 5-0 y 6-0, respectivamente, e hicieron desaparecer del mapa a los de Corberán.