El Real Madrid de baloncesto continúa su ritmo imparable y ha consolidado su dominio con una importante victoria a domicilio en el Palau Olímpic de Badalona, imponiéndose al Joventut por 75 a 80. Este triunfo es la tercera victoria consecutiva del equipo de Sergio Scariolo fuera de casa en solo siete días, tras las conseguidas en Zaragoza (Liga) y Barcelona (Euroliga).
Los blancos demostraron su capacidad para ganar incluso con marcadores bajos y en un encuentro que se caracterizó por una alta exigencia física y de entrega.
El «segundo enfrentamiento más repetido en la historia de la ACB» se decidió por la profundidad de la plantilla madridista. El ataque se repartió, pero destacó el debut en Liga del pívot Alex Len, quien demostró su poder de intimidación:
Alex Len (12 puntos en 12 minutos): El ucraniano fue el máximo anotador del equipo, protagonizando la jugada del partido con un tapón seguido de un espectacular alley oop con mate y tiro adicional.
Los otros protagonistas fueron Maledon (11 puntos) y Feliz (10 puntos) Ambos se sumaron a la anotación de dobles dígitos, siendo Feliz clave en el tercer cuarto con 9 puntos.
El partido comenzó con defensas imponiéndose a los ataques (17-16 en el primer cuarto), pero el Madrid ajustó en la segunda parte. Un parcial de 4-14, marcado por la irrupción de Len, dio la primera ventaja al Madrid (35-37).
Aunque el Madrid se despegó en el tercer cuarto (46-57) con el mejor momento ofensivo de Feliz, el Joventut, liderado por Ricky Rubio y Ante Tomic, forzó un final de infarto. La Penya se acercó peligrosamente a un solo punto (75-76) a falta de un minuto.
Fue la templanza mental del Real Madrid la que sentenció el partido. Dos buenas defensas consecutivas y cuatro puntos de Facundo Campazzo desde la línea de personal aseguraron la quinta victoria en Liga (75-80), demostrando que este equipo sabe sufrir y ganar en los momentos de máxima presión.

