Continúan los escándalos sobre los audios del VAR. El periodista afín a Joan Laporta, Gerard Romero, fue un paso más allá al amenazar al Comité Técnico de Árbitros (CTA) por la segunda amarilla a Vitor Roque.
En su canal de Twitch, Gerard Romero afirmó que «pondría barricadas en el CTA si no retiraban la segunda amarilla al delantero brasileño». Alegó tener un documento que haría temblar al CTA, pero esperará la resolución del comité antes de revelar esa información.
Es lamentable que amenace a todo el mundo pero obvie las imágenes que beneficiaron al Barça. Ayer, en la primera jugada del partido, el colegiado no señaló un claro penalti a favor del Alavés, alegando un presunto fuera de juego del delantero del cuadro albiazul. Sin embargo, las imágenes demuestran que no hubo fuera de juego.
En cuanto al otro penalti, fueron unas manos de Cancelo que el colegiado consideró que tenía los brazos pegados, algo que se pita o se pita en función de cada partido, pero que sí que han señalado en algunos del Real Madrid, tal y como pasó en aquel histórico Real Madrid-Sevilla de Valdebebas con mano de Militao.
Sobre las tarjetas de las que se queja Gerard Romero a Vitor Roque, la primera fue por soltar el brazo ante la presión de Rafa Marín, y la segunda por un supuesto pisotón al mismo defensor. En los planos de televisión no se aprecia claramente si le pisó o no, pero el central sevillano ha mostrado en sus redes sociales los tacos clavados en su tobillo.
¿Quién le pone los audios en bandeja?
Lo más grave de todo este asunto es quién le hace llegar los audios a Gerard Romero. Siempre casualmente, son audios que supuestamente perjudican al Barça y benefician al Real Madrid. Esto debe investigarse para determinar el origen de estos audios. En contadas ocasiones mostró los que verdaderamente importan y apenas le dio importancia. ¿Dónde está el del penalti a Brahim? ¿O los del derbi del Metropolitano en Liga? ¿Y los de Sevilla?
Es muy grave todo esto, cada vez la Liga Española y el Comité de Árbitros tienen menos credibilidad. Se debe realizar una limpieza total del CTA por el bien del fútbol español. Algo que el Real Madrid lleva pidiendo muchos años…
