El Real Madrid ya está pasando página de lo que pasó el pasado domingo en Yeda, donde perdió la Supercopa de España frente al FC Barcelona. En la expedición blanca tenían claro que el luto por la derrota tenía que durar hasta llegar al aeropuerto de Barajas; a partir de ahora hay que centrarse en los partidos de Liga, Copa del Rey y Champions.
El calendario que viene ahora es bastante favorable; se van a jugar tres partidos seguidos en el Bernabéu: el jueves frente al Celta en la Copa del Rey, el domingo frente a Las Palmas en Liga, y el miércoles en Champions frente al Salzburgo.
En el club blanco esperan que hasta el derbi frente al Atlético de Madrid el 9 de febrero en el Bernabéu, se puedan ganar todos los partidos y así olvidar el fracaso de la Supercopa.
Florentino tuvo un gran gesto con la plantilla después de la final de la Supercopa, viajando en el mismo avión donde viajaban los jugadores; en principio no estaba previsto que viajara con ellos, la idea era que el presidente blanco volviera a la capital de España en el mismo avión privado que le llevó a Arabia. Florentino quiso tener ese gesto para darle apoyo a la plantilla y al técnico Carlo Ancelotti.
De hecho, en la ceremonia de entrega de medallas, Florentino se acercó a Modric y le dijo muy cariñosamente: «No se pueden ganar todas las finales», mostrando así su apoyo a la plantilla tras la dolorosa derrota.
Según el periodista Enrique Ortego, está previsto que en los próximos días la cúpula del club blanco y Ancelotti tengan una reunión para hablar de posibles fichajes en el mercado de invierno. El técnico italiano alberga la esperanza de que el Liverpool cambie de opinión y venda a Arnold, cosa que es muy difícil que suceda, y tampoco el Madrid está por la labor de fichar en enero.
El Madrid esperará al verano para cerrar los fichajes. La idea del club es que Ancelotti tire de la cantera y le dé más oportunidades a Asencio y a Lorenzo Aguado. El horroroso partido de Tchouaméni frente al Barça hace que desde el club pidan más minutos para el central canario, que cuando ha jugado, el equipo se ha sentido más seguro en defensa.
El mensaje desde el seno blanco es pasar página y olvidar lo que pasó en la Supercopa, y centrarse en los próximos partidos que pueden ser claves para el desarrollo de la temporada, sobre todo ganar los próximos dos partidos de Champions frente al Salzburgo en el Bernabéu y frente al Brest a domicilio, y esperar una carambola para evitar jugar una eliminatoria en el mes de febrero que aún cargaría más el calendario de lo que está.
