Jude Bellingham se unió a la goleada madridista (0-3).
El de Birmingham sigue en un estado de dulce, totalmente envidiable, asemejándose al Jude de la pasada campaña.
Suyo fue el tercer tanto de la tarde en Butarque y por él fue el cántico desde el graderío madridista con el «Hey Jude» de los Beatles. Quiere prolongarlo en Liverpool, en Anfield, en el territorio que les vio nacer.
Bellingham empujó a placer un remate que dio en el poste y que supuso el 0-3, a la postre, tras su remate de cabeza.