Arda Güler se queda. El talento turco del Real Madrid ha despejado cualquier duda sobre su futuro tras el partido ante Pachuca, en el que volvió a brillar con un gol y una gran actuación. Después del 3-1 en las semifinales del Mundial de Clubes, el joven mediapunta pasó por zona mixta y fue claro: “Cuando juego, soy feliz. Y queda mucho Arda.”
Sus palabras no solo confirman su continuidad, sino que reflejan el cambio radical que ha vivido desde la llegada de Xabi Alonso. Es el elegido para ser su nuevo «playmaker», su jugón a lo Florian Wirtz en Leverkusen.
El técnico tolosarra ha confiado en él y le está dando minutos importantes, algo que no había sucedido con regularidad en la anterior etapa con Ancelotti. Arda ha respondido con compromiso, trabajo y talento, demostrando que puede tener un papel relevante en el nuevo proyecto.
De promesa a pieza importante
Güler llegó como uno de los grandes fichajes de futuro, pero la falta de oportunidades habían sembrado dudas sobre su encaje en el Madrid. Ahora, con el respaldo total de Xabi y su primera gran actuación en un torneo oficial con el primer equipo, el escenario ha cambiado por completo. En dos partidos ya convence.
En el club valoran su actitud y su calidad, y no se contempla ninguna cesión. Arda está decidido a triunfar en el Real Madrid y Xabi, por ahora, también lo ve como un jugador útil y con margen de crecimiento inmediato.
