El FC Barcelona ganó al Valencia (1-2) en la primera jornada de Liga. Sánchez Martínez perjudicó a los che al no señalar un penalti sobre Hugo Duro y no mostrar la segunda amarilla a Pau Cubarsí.
El FC Barcelona logró una controvertida victoria por 1-2 ante el Valencia en la primera jornada de Liga, en un partido marcado por las decisiones arbitrales de Sánchez Martínez que dejaron mucho que desear para los locales.
El árbitro perjudicó al Valencia al no señalar un claro penalti sobre Hugo Duro, que sí que se lo pitaron el año pasado a Gundogan en Canarias, y no mostrar la segunda amarilla a Pau Cubarsí, lo que desató la indignación en Mestalla.
El Valencia se adelantó en el marcador con un gol de Hugo Duro en el minuto 44, pero Robert Lewandowski empató rápidamente en el 45, justo antes del descanso.
La polémica se intensificó en la segunda mitad cuando, en el minuto 49, el árbitro sancionó un penalti muy discutido sobre Raphinha que permitió al Barça ponerse por delante.
Sin embargo, la mayor controversia llegó cuando Sánchez Martínez decidió no pitar un penalti sobre Hugo Duro, tras una acción de Cubarsí, y además, no le mostró la segunda amarilla al defensor del Barça después de cortar un contragolpe con el brazo, agarrando nuevamente a Hugo Duro.
Esta serie de decisiones dejó en evidencia lo que muchos consideran la primera «mano arbitral» de la temporada en favor del FC Barcelona.
