Hoy se han reunido en Las Rozas dos directivos del Real Madrid con Medina Cantalejo, presidente del CTA, y Clos Gómez, director del VAR. La razón de la reunión era para visionar los audios del partido frente al Espanyol, específicamente la entrada salvaje de Carlos Romero a Mbappé que pudo haber lesionado de gravedad al jugador francés.
Muñiz Ruiz solo mostró cartulina amarilla cuando era una roja de libro. Iglesias Villanueva, colegiado de VAR en dicho partido, sorprendentemente no avisó a Muñiz Ruiz para que expulsara a Carlos Romero. La prensa internacional catalogó esta jugada de escándalo mundial.
Según los directivos del Madrid que acudieron esta mañana a la reunión del CTA, han dicho que el tono de la reunión ha sido cordial. Solo les mostraron el audio de la entrada de Carlos Romero a Mbappé y no sacaron nada en claro. Querían hablar también del arbitraje que sufrió el Madrid el pasado sábado en El Sadar, pero no tenían mucho interés en hablar sobre lo que pasó frente a Osasuna.
«Nos están jodie*** a sabiendas»
Los directivos blancos salen con la sensación de que los miembros del CTA no tienen ninguna intención de cambiar nada. «Pronto nos hemos dado cuenta de que no hay nada que hacer con el tema arbitral. Tenemos la sensación de que nos están jodiendo a sabiendas, y lo más triste es que no hay nada que hacer«, explican desde OK Diario dando voz al sentir de los madridistas tras la tarjeta roja que vio Jude Bellingham.
«Con los actuales dirigentes del CTA, nos ha dado la sensación de que no tenían ninguna intención de dialogar con nosotros para arreglar las cosas. Están muy a gusto como están. No tenemos nada que hacer, esta batalla la tenemos totalmente perdida», sentenciaron tras esa misma reunión. Esta es la conclusión que han sacado los dirigentes madridistas, que pese a ello van a seguir luchando contra todas estas injusticias.
Lo que está claro es que el Real Madrid ha salido de esta reunión con muy mal sabor de boca. No hay nada que hacer con este sistema arbitral, al menos mientras estén al frente Medina Cantalejo y Clos Gómez. Una auténtica vergüenza para el fútbol español que ha perdido toda la credibilidad.
