El guardameta belga Thibaut Courtois ha sido el primer jugador en pedir perdón por la derrota de ayer en la final de la Supercopa de España frente al Barça. Pese a que el arquero fue de los pocos jugadores que salvó del desastre al Madrid ayer, quiso pedir perdón por la derrota a través de sus redes sociales.
Puso un post en redes, al acabar el partido: «El partido no salió como queríamos y estamos muy disgustados con el resultado. Tenemos que aprender para el futuro,» escribió Courtois.
El portero era el que menos tenía que pedir perdón porque fue de los pocos que se salvó del desastroso partido del Madrid. Courtois salvó al Madrid de una goleada más escandalosa con sus cuatro grandes paradas. En los goles no pudo hacer nada, ya que la defensa le dejó totalmente vendido, en los cinco tantos encajados.
Pese a que él no tiene ninguna responsabilidad en la derrota, ha sido el único, por el momento, que ha tenido la decencia de pedir perdón a la afición blanca por la derrota de ayer frente al Barça, y que tiene a la afición merengue muy cabreada por la pobre imagen que dio el equipo, que jugó sin alma y sin orgullo, que es lo más preocupante.
Junto a Courtois, solo se salvaron dos jugadores: Fede Valverde, que, pese a que el uruguayo no tuvo su mejor día, lo dejó todo en el terreno de juego y demostró tener orgullo, y el otro que se salvó fue Mbappé, que fue el único delantero que creó algo de peligro, marcó un golazo y provocó la expulsión de Szczensy. La afición va a tardar mucho tiempo en olvidar el ridículo de ayer.
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