La derrota ante el Liverpool en Anfield ha vuelto a poner bajo la lupa a Dean Huijsen. El joven central, internacional español de tan solo 20 años, ha dejado dudas en otra gran cita, sumando esta actuación a una lista de errores en momentos clave, incluyendo el derbi del Metropolitano, el Clásico y su expulsión por un error de juventud en el Mundial de Clubes.
La preocupación en el cuerpo técnico madridista, liderado por Xabi Alonso, no es la falta de talento, sino la actitud y la concentración.
Xabi Alonso confía ciegamente en que Huijsen será un «jugador generacional» y está convencido de su potencial. Sin embargo, el técnico le ha transmitido un mensaje claro: debe trabajar más y ser más profesional.

En Valdebebas, se cree que la inmensa calidad del central le hace, en ocasiones, pecar de confiado. El cuerpo técnico está convencido de que, si Huijsen redobla sus esfuerzos, alcanzará la excelencia de forma continuada, superando los lapsus que le han costado caro al equipo en las grandes noches. Los errores puntuales en las citas importantes son, para el cuerpo técnico, síntomas de la desconexión mental que debe pulir.
Más allá de las lagunas defensivas, Huijsen es un pilar fundamental en la filosofía de Xabi Alonso por su capacidad única de entender el rol del zaguero. El técnico está consiguiendo que el central asuma un papel cada vez más importante: el del primer creador de juego.

