Tiene solo 25 años, pero ya se habla de él como uno de los mejores del mundo. Y en Valdebebas lo saben bien. Diogo Costa, actual guardameta del Oporto y de la selección portuguesa, será uno de los nombres propios que el Real Madrid seguirá de cerca durante el próximo Mundial de Clubes. Porque cuando se trata del futuro de la portería blanca, no se deja nada al azar. Ya sea para firmar ahora en 2025 o en 2026.
Casillas ya lo avisó: “Va a ser un gran portero”
Uno que conoce bien la portería del Madrid, y también la del Oporto, es Iker Casillas. Y su opinión fue clara hace tiempo: “Es una estrella, va a ser un gran portero”. Poco a poco, la profecía se ha cumplido. Diogo Costa no solo ha brillado en la Liga portuguesa, sino que ha firmado actuaciones de nivel top en competiciones europeas y con su selección.
Su última víctima: España, en la final de la Nations League, donde volvió a demostrar su especialidad desde los 11 metros. Un portero con reflejos felinos, sangre fría y, además, una virtud que cada vez se valora más en la élite: juega muy bien con los pies.

Un perfil que encaja en el modelo blanco
En el Real Madrid se estudian todos los movimientos del mercado, especialmente en puestos clave como la portería. Con la continuidad de Lunin aún por resolver, y con Courtois plenamente recuperado pero con 32 años ya cumplidos, el club mira al futuro con previsión. Y Diogo Costa es un nombre que está muy presente en los informes de la dirección deportiva.
Maniche también lo resumió perfectamente: “Además de su calidad bajo palos, es muy bueno saliendo y jugando con los pies”. Un perfil completo, moderno, con personalidad y experiencia internacional.

Blindado por el Oporto, pero con destino grande
Aunque tiene contrato con el Oporto, Diogo Costa no tardará en dar el salto a una gran Liga. Así lo reconocen desde el entorno del club portugués, donde ya dan por hecho que su futuro pasa por un equipo top de Europa. El Madrid no se precipita, pero sigue cada detalle con atención.
En el Mundial de Clubes, con todas las miradas puestas en las estrellas ofensivas, en Valdebebas también se tomará buena nota de lo que haga bajo palos un portero llamado a marcar una época.