El Real Madrid ha vuelto a impedir que DAZN y Movistar realicen sus previas y post partidos desde el interior del Santiago Bernabéu. Es la tercera temporada consecutiva en la que el club mantiene este veto, una medida que, según fuentes del propio club, responde a la interpretación de que esas emisiones no forman parte de los derechos que LaLiga comercializa a las cadenas.
La decisión, que se ha aplicado ya en los últimos encuentros oficiales y de preparación, confirma la posición firme de la entidad blanca: el control del acceso a las instalaciones y la explotación audiovisual dentro del estadio corresponde al club o a quien detente los derechos contratados por la competición. Con ello, el Real Madrid pretende ordenar quién y cómo puede emitir desde el Bernabéu en días de partido.
Qué significa el veto en la práctica
El veto afecta, básicamente, a las retransmisiones en directo que suelen instalar carpas, pupitres o conexiones en las inmediaciones del estadio con la imagen del mismo como fondo. DAZN y Movistar —plataformas que ostentan derechos audiovisuales de LaLiga en diferentes franjas— han visto limitada esa posibilidad de producir contenido in situ y deben recurrir a exteriores o a los estudios habituales para sus previas y análisis.
La medida, repetida por tercer año, no impide que los canales cubran el partido, posteriormente, desde los métodos convencionales que marca la propia competición; sí les priva de la presencia física en espacios concretos del Bernabéu durante el calentamiento y antes de los encuentros de Liga. Una circunstancia que modifica la puesta en escena habitual de las conexiones previas y el tono visual de sus producciones.
En el día de ayer, dichas televisiones, utilizaron imágenes de Real Madrid Televisión. Es algo recurrente que sí que pueden explotar, aunque no de cosecha propia ni desde el interior del estadio. Las previas, este año, se seguirán en directo a través de los canales oficiales del club merengue.
