En anteriores temporadas se armó un revuelo general por una falta de Bellingham sobre Correa o de Nacho sobre Portu; silencio total por la entrada criminal de Marcos Llorente a Fran García.
En el derbi de la temporada pasada, Bellingham realizó una entrada sobre el jugador del Atlético, Correa, quien tuvo que ser sustituido y, según informaciones, se había lesionado. Sin embargo, a los tres días, Correa ya estaba jugando nuevamente.
En ese momento, parte de la prensa calificó al jugador inglés de violento y, de hecho, llegaron a pedir una sanción para Bellingham. Algo similar sucedió con una entrada de Nacho a Portu en un Girona-Real Madrid. Esos mismos que clamaban al cielo, hoy mantienen un silencio total muy cómplice por la entrada vista en el derbi.
Marcos Llorente hizo una durísima entrada a Fran García. Inicialmente, el colegiado Busquets Ferrer mostró tarjeta amarilla, pero tras ser avisado por la sala VAR, fue al monitor, y con muy buen criterio cambió la tarjeta amarilla por una roja, expulsando justamente al jugador rojiblanco.
Sin embargo, hoy ningún medio de comunicación ha hablado sobre esta entrada, ni han pedido sanción para Marcos Llorente como lo hicieron con Bellingham. Esto pone de manifiesto el doble rasero habitual.
Sanción ejemplar por la vergüenza en la grada
A pesar de este incidente, el derbi fue bastante limpio en comparación con lo que hemos visto en los últimos años. Ambos equipos se dedicaron a jugar al fútbol con bastante nobleza, haciendo de este uno de los derbis más limpios de las últimas temporadas.
La nota negativa del partido la pusieron los radicales del Atlético de Madrid, quienes lanzaron objetos al terreno de juego, obligando al árbitro a suspender el partido durante 20 minutos. Esta actitud podría salirle muy cara al club colchonero, ya que podría recibir una sanción ejemplar por parte del Comité de Competición.