El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, finalmente no irá al clásico del próximo sábado en Montjuïc. En principio, el presidente blanco tenía previsto asistir al partido, pero el tweet del portavoz adjunto de Joan Laporta insultando a Vinícius. El tweet del portavoz decía: «No es racismo, Vinícius merece una colleja por payaso», todo esto por unas bicicletas que le hizo Vinícius al defensa del Braga en el partido de Champions del pasado martes.
Desde el Real Madrid esperaban una disculpa por parte del portavoz de Laporta o del propio presidente azulgrana, pero nada más lejos de la realidad. El presidente azulgrana ni se ha disculpado ni ha cesado a su portavoz, Mikel Camps. Eso ha hecho que Florentino no viaje este sábado a Barcelona. Desde la directiva blanca están hartos de los insultos que llegan desde la ciudad condal. Si eso pasara al revés y un directivo blanco insultara a un jugador del Barça, lo habrían cesado de inmediato.

Florentino también está muy harto del discurso del presidente azulgrana, Joan Laporta, con el caso Negreira, culpando al Real Madrid de todo, que si el Real Madrid era el equipo del régimen, que si el madridismo sociológico y más tonterías de esta clase. Pero no da ninguna explicación del pago durante más de 18 años de 7,5 millones de euros al segundo de los árbitros, cuando la denuncia ni siquiera salió de Madrid, sino de un periodista de Barcelona. Esto que le pasa al presidente del FC Barcelona tiene un nombre: madriditis aguda.