Nacho Fernández ha hecho oficial su marcha del Real Madrid. Se va a Arabia Saudí y ficha por dos temporadas por el recién ascendido Al Qasiah, entrenado por el ex madridista Michel. De esta manera, Nacho dice adiós al club de su vida donde lleva 23 años. El de Alcalá de Henares llegó a la cantera blanca con tan solo 10 años y fue escalando categorías hasta llegar al Castilla en la temporada 2010-2011.
En la temporada 2011-2012, ascendió con el Castilla a Segunda División, venciendo en el playoff de ascenso al Cádiz (1-4 en el Ramón de Carranza y 2-0 en Valdebebas). En aquel Castilla había jugadores muy buenos que ahora son estrellas en Primera División: Carvajal, Joselu, Lucas Vázquez, Jesé y Morata entre otros, un auténtico equipazo.

Esa misma temporada, el técnico portugués José Mourinho hizo debutar a Nacho con el primer equipo. Fue en Mestalla frente al Valencia, el Madrid ganó 2-6, y Nacho fue titular. El técnico luso le hizo jugar de lateral izquierdo y Nacho hizo un auténtico partidazo.
En la campaña siguiente, 2013-2014, con Carlo Ancelotti como entrenador, Nacho subió al primer equipo y en su primera temporada conquistó la Champions y la Copa del Rey. Nacho ya no se movería de la primera plantilla, siendo un jugador muy importante para todos los técnicos que ha tenido: Rafa Benítez, Solari, Zidane en dos etapas y Ancelotti.
Con todos ellos no ha sido titular indiscutible, pero sí ha sido un jugador muy importante, sobre todo por su polivalencia: ha jugado en todas las posiciones de la defensa y siempre con un gran rendimiento.
En las doce temporadas que ha estado Nacho en la primera plantilla del Real Madrid, ha conquistado 26 títulos, que junto a Modric le convierten en el jugador con más títulos de la historia del Real Madrid, y ha conquistado 6 Champions igualando al mítico Paco Gento junto a Carvajal, Modric y Kroos. Nacho siempre ha sido un canterano ejemplar y un ejemplo para todos los canteranos de cómo se tiene que comportar un jugador del Real Madrid, tanto dentro como fuera del terreno de juego.
Sin duda, le deseamos lo mejor en su nueva aventura y siempre lo recordaremos como un madridista ejemplar. Seguro que en un futuro volverá a su casa, las puertas del Madrid siempre estarán abiertas para él.