Toni Kroos tardó muy poco en volver a dejar su sello con la selección de Alemania. Se fue hasta 998 días, exactamente, y ha tardado 7 segundos en demostrar que está para lo que él quiera.
El alemán, tras sacar de centro, vio desmarcado a Florian Wirtz y desde fuera del área conectaba un zapatazo para marcar el 0-1 en Francia.
7 segundos le bastaron a Toni para demostrar que jamás debió irse y que está tardando en plasmar su firma en un nuevo contrato con el Real Madrid. Es único.