La FIFA utiliza a Mbappé y Bellingham para promocionar su nuevo Súper Mundial de Clubes. La FIFA ya ha comenzado a promocionar su evento que promete revolucionar el fútbol de élite.
Este torneo se celebrará el próximo verano de 2025 en Estados Unidos, con fechas que van desde el 12 de junio hasta el 12 de julio. Eso hará que el calendario quede apretado hasta el final y que el verano sea muy distinto al que ya se vivió en las últimas temporadas.
Para capturar la atención mundial, la FIFA ha utilizado las imágenes de los madridistas Kylian Mbappé y Jude Bellingham en su campaña promocional, destacando a estos dos astros del fútbol como figuras emblemáticas del nuevo formato.
Este Súper Mundial de Clubes contará con la participación de 36 equipos, y su estructura será similar a la del Mundial de Selecciones. Los equipos se dividirán en grupos de cuatro, donde los dos primeros de cada grupo se clasificarán para los octavos de final.
Sin embargo, el principal desafío de este nuevo torneo radica en el calendario. El Real Madrid, por ejemplo, enfrentará una temporada extenuante de once meses, en la cual podría disputar más de 70 partidos si llega a las fases finales de las siete competiciones en las que participa: Liga, Champions, Copa del Rey, Supercopa de España, Intercontinental, Mundial de Clubes y Supercopa de Europa.
Calendario completo con el Súper Mundial de Clubes
Uno de los problemas más grandes que trae consigo este apretado calendario es el poco descanso que tendrán los jugadores. Si el Real Madrid llega a la final del Mundial de Clubes, que se jugará el 12 de julio, los futbolistas apenas dispondrán de una semana de vacaciones antes de que comience la nueva temporada de liga a mediados de agosto. Este ritmo frenético no es ideal para el espectáculo, ya que la acumulación de partidos aumenta el riesgo de lesiones.
La preocupación por la saturación de competiciones es cada vez más evidente. Demasiados torneos podrían estar perjudicando la calidad del fútbol, ya que los organismos responsables parecen más enfocados en los beneficios económicos que en el bienestar de los jugadores. Esto no solo afecta a los futbolistas, que son los pilares del deporte, sino también a la calidad del juego, que podría verse comprometida por el cansancio y las lesiones.
La FIFA necesita encontrar el equilibrio
En este contexto, la FIFA debe considerar el impacto a largo plazo de su enfoque. Aunque la idea de un Súper Mundial de Clubes es emocionante y puede atraer a una gran audiencia global, es crucial encontrar un equilibrio que proteja a los jugadores y mantenga la calidad del fútbol en su punto más alto. La solución podría ser reducir la cantidad de competiciones para garantizar que cada torneo se juegue al más alto nivel posible.
En conclusión, mientras la FIFA sigue adelante con sus planes para el Súper Mundial de Clubes, es fundamental que se priorice el bienestar de los jugadores. Solo así se puede garantizar un fútbol de calidad que respete tanto a los aficionados como a los profesionales que hacen posible este deporte.