Un Real Madrid-Barça jamás será descafeinado. La polémica del Clásico, pase lo que pase, está servida.
El partido entre el Real Madrid y el FC Barcelona en Nueva Jersey comenzó sin inconvenientes, pero tuvo que ser interrumpido en el minuto 13 debido a una fuerte tormenta eléctrica. Aunque se esperaba que las tormentas previstas pudieran afectar el inicio del encuentro, el partido pudo comenzar según lo planeado… por poco tiempo.
Polémica del Clásico: gol anulado a Arda Güler
Volvieron al terreno de juego todos los protagonistas y ya se empezó con una acción polémica, en favor del Barça, que bien pudo acabar suponiendo el 1-0. La realización, made in Roures, pasaba de ofrecer planos concisos sobre la jugada. Se trataba de un gol anulado a Arda Güler, una obra de arte del futbolista turco. El balón en profundidad lo pinchaba a las mil maravillas, dentro del área, para terminar colándosela a Ter Stegen y marcar el tanto inicial del Clásico. El árbitro, sin embargo, aguó la fiesta del madridismo en la grada ya que anuló el gol.
Ceballos pidió penalti
Al cabo de unos minutos, tras esa misma jugada, Dani Ceballos se quejó de un agarrón persistente dentro del área, aunque el árbitro hizo oídos sordos, caso omiso, y pasó completamente de enredarse en un posible penalti. Nuevamente, tampoco fue repetido por televisión… pese a las protestas repetidas del de Utrera.
Endrick pidió otro
Endrick también reclamó un posible penalti, dentro del área, por un tacklin, justo cuando iba a rematar y ya estaba preparado para marcar. El árbitro, pese a las protestas del brasileño, pasó olímpicamente de esa acción.

