Las palabras de ayer en la rueda de prensa de Mbappé están dando la vuelta al mundo; destapó la caja de los truenos en París.

El francés acudió a Clairefontaine para dejar su primera reacción como nuevo jugador del Real Madrid. Salió diciendo que lo había pasado muy mal en su último año en el PSG, y que solo lo salvaron Luis Campos y Luis Enrique. «Si no es por ellos, me hubiera pasado todo el año en el banquillo, lo que he pasado no se lo deseo a nadie, ahora por fin voy a cumplir mi sueño de jugar en el Real Madrid», comentó.

Estas palabras no han sentado nada bien a los dirigentes del club parisino. Desde el PSG dicen que Al-Khelaïfi nunca ha tomado decisiones en el vestuario y que Luis Enrique es el único que toma esas elecciones vitales y decide el once titular, y nadie se atreve a tomar decisiones técnicas.

«Las declaraciones de Mbappé demuestran que tiene muy poca clase, y que algún día se sabrá toda la verdad, pero que de momento el PSG se mantendrá al margen por respeto al club y a la ciudad de París», apuntaron en un comunicado oficioso. Eso demuestra la mala relación que tenían Mbappé y el PSG.

Lo que no explican es el asunto de Al-Khelaïfi. Cuando el verano pasado le prohibió ir a la gira asiática porque Mbappé se negó a renovar el contrato, y después quiso traspasarlo, pero el jugador parisino se negó porque le tenían que pagar varias primas de fichaje que le habían prometido. Ahora están negociando los últimos flecos de si Mbappé perdona parte de la prima de fichaje con el PSG. Ya dijo Mbappé que él no quería salir del PSG mal y que dejaría algo de dinero en las arcas del club parisino.

Veremos cómo acaba este asunto, pero las palabras del presidente del PSG no ayudan para que sea una salida amistosa. Esto demuestra lo mal que lo ha tenido que pasar Mbappé durante estos años

Comentarios

Share.

Apasionado de los deportes y del Real Madrid.

Comments are closed.