El Barça es el nuevo líder de la Liga, pero sus primeros tres partidos no están exentos de polémica arbitral.
Tan solo llevamos tres jornadas de La Liga, y el FC Barcelona ya ha estado envuelto en polémicas en cada uno de sus partidos contra Valencia, Athletic Club y Rayo Vallecano.
Polémicas en Mestalla: penalti y expulsión
En el primer partido contra el Valencia en Mestalla, se produjeron varias jugadas controvertidas. Una de las más discutidas fue un claro penalti de Cubarsí sobre Hugo Duro, donde el defensa azulgrana empujó al delantero dentro del área. Además, Cubarsí debería haber sido expulsado por un claro agarrón a Hugo Duro, cortando un contraataque. El central ya tenía una tarjeta amarilla, y de haber recibido la segunda, el Barcelona habría quedado con un jugador menos.
Gol ilegal del Barça
La segunda jornada, frente al Athletic Club de Bilbao en Montjuic, terminó con una victoria 2-1 para el Barcelona, pero no sin polémica. El primer gol del Barça, anotado por Lamine Yamal, no debió subir al marcador debido a un fuera de juego posicional de Lewandowski. Además, Cubarsí, que parece involucrado en una polémica por partido, cometió otro claro penalti que tuvo que revisar el VAR.
Tres polémicas decisiones arbitrales en Vallecas
Ayer, en el Estadio de Vallecas, el Barcelona venció 1-2 al Rayo Vallecano, pero el partido estuvo marcado por tres nuevas controversias arbitrales. La primera fue un penalti no señalado de Lamine Yamal sobre Isi Palazón, cuando este se disponía a rematar y fue claramente tocado en la pierna por el jugador del Barça. La segunda polémica involucró al portero Ter Stegen, quien agarró del cuello a un jugador del Rayo sin que el árbitro tomara acción alguna, ni siquiera mostrando tarjeta. Finalmente, en un saque de banda, Koundé dio un codazo a un jugador del Rayo sin que mediara el balón, lo que debería haber resultado en una tarjeta roja para el defensa francés.
Como decía la mítica canción de Julio Iglesias, «la vida sigue igual». Esta Liga ha comenzado tal y como terminó la pasada, con decisiones arbitrales que parecen favorecer al Barcelona. Si el Real Madrid quiere volver a ganar la Liga, tendrá que hacerlo muy bien, ya que, a la vista de lo ocurrido hasta ahora, no se lo van a poner fácil.
