Aún colea el arbitraje escandaloso de Bengoetxea en el Sevilla-Real Madrid del pasado sábado en el Sánchez Pizjuán. El colegiado vasco anuló dos goles al equipo blanco en 8 minutos. Primero, le anuló un gol a Valverde por fuera de juego cuando unas imágenes grabadas por un aficionado desde la grada demuestran que Sergio Ramos estaba por detrás de Bellingham, por lo tanto, no había fuera de juego. No contento con eso, 5 minutos después, le anuló un gol a Bellingham. Según De Burgos Bengoetxea, fue porque el jugador Ocampos estaba tendido en el césped cuando ni siquiera pitó falta. Incluso hizo un gesto diciéndole que se levantara. También dejó de señalar un claro penalti de Jesús Navas a Vinícius.
El próximo sábado se juega el clásico en Montjuïc, y visto lo ocurrido ayer en el Athletic de Bilbao-Barcelona, lo del sábado en Sevilla se puede quedar en un juego de niños. Martínez Munuera dejó de pitar un claro penalti a favor del Bilbao por el agarrón de Joao Cancelo a Nico Williams. También tuvo que expulsar a Oriol Romeu por dos durísimas entradas, y el gol del Barça es posible que fuera en fuera de juego.
El Madrid tendrá que viajar a Barcelona mentalizado de que no se lo van a poner fácil. Tendrá que jugar muy bien si quiere ganar en Montjuïc, ya que si el partido va igualado, temblarán por cualquier decisión arbitral.
