El Real Madrid ha arrancado esta misma mañana la nueva era de Xabi Alonso. Con la presentación del técnico tolosarra, el conjunto blanco da el pistoletazo de salida a la que se espera que sea una etapa, como mínimo, tan exitosa como la de Carlo Ancelotti que se cerró el pasado sábado el en Santiago Bernabéu.
Este 26 de mayo quedará marcado en la historia del conjunto no blanco no solo por lo relativo al regreso del que un día fue una pieza fundamental en el Real Madrid, sino porque se espera que sea un entrenador que marque una época de blanco. Y la realidad es que la primera rueda de prensa de Xabi como entrenador del Real Madrid ha dejado muy buenas sensaciones en la parroquia blanca, aunque es evidente que tiene asuntos por resolver.
El esquema y el estilo de juego, claves en la cabeza de Xabi
La primera de ella, y tal vez la más importante, tiene que ver con el esquema de juego que empleará con la plantilla blanca. En la directiva, la confianza en el criterio de Xabi es absoluta, y el propio entrenador ha asegurado tener claras las ideas relativas al fútbol que hará. Sin embargo, por el momento, el técnico tolosarra no ha desvelado si utilizará ese 3-5-2 con el que ha triunfado en el Bayer Leverkusen, o apostará por el 3-4-3 que se presupone más adaptable al fútbol moderno.
Pero más allá de la formación, Xabi sí ha dado pistas sobre cómo jugará su Real Madrid. Y tratándose de un entrenador que ha sabido adaptar su sello en el Bayer Leverkusen de la forma en la que lo ha hecho, las expectativas son muy altas: “Hoy, el fútbol, te pide ser flexible y dinámico. Te pide saber mover piezas. Tengo una idea de cómo queremos jugar, pero la foto fija del sistema puede cambiar. Quiero que el equipo transmita emoción, energía, jugar de forma ambiciosa y que conecte con la gente”.

Unas declaraciones con las que ha asegurado tener claras cuáles son las fortalezas y las debilidades de su plantilla. Y ante este panorama, Xabi parece haber detectado el trabajo sin balón como una de los principales problemas del conjunto blanco la pasada temporada, por lo que ha hablado de la importancia de la presión alta: “Lo que me gusta es que sepamos elegir los momentos. Hay que saber hoy en día manejarse en diferentes contextos. Tenemos jugadores para ello”.
Las cuatro patatas calientes que Xabi afrontará en la gestión del vestuario
Ha hablado también, por supuesto, de casos individuales. Y el de Rodrygo Goes es uno de los que más cola ha traído en La Casa Blanca, después de haber desaparecido del mapa en el tramo final de la temporada, lo que ha llevado a muchos a especular con una posible salida. Un escenario que, sin embargo, Xabi no parece valorar, al menos por el momento: “Es jugador del Madrid y con todos vamos a tener una conversación porque la merecen. Es un jugador espectacular y le necesitaremos”.
Otro de los nombres propios que ha aparecido en la rueda de prensa ha sido el de Jude Bellingham, cuya posición en el campo este año ha sido uno de los principales dilemas a los que se ha tenido que enfrentar Carletto. Por su parte, Xabi sí parece tener una idea aproximada de la influencia del inglés: “Jude puede ser especial en cualquier sitio. Yo le veo claro como centrocampista y con todo ese potencial que tiene vamos a intentar que sea lo más eficiente posible, ese es uno de los pasos que tenemos que dar”.
Y por supuesto, como no podía ser de otro modo, también ha hablado de los que son la cara visible del proyecto: Vinícius y Mbappé. Y si bien no ha hablado sobre el rol ofensivo que desempeñará cada uno en su Real Madrid, Xabi sí ha hecho especial hincapié en la importancia de ambos en su proyecto: “Son diferenciales, marcan las diferencias y les tenemos que sacar todo lo que tienen. Tengo ideas. Todavía queda tiempo hasta que nos juntemos con ellos. Pero para mí es muy importante esa comunicación de qué es lo que queremos”.