Tres leyendas del Real Madrid van a decir adiós este sábado al club blanco… pero no serán las únicas. Raúl González Blanco pondrá fin a su etapa como entrenador del Real Madrid Castilla.
El eterno ‘7’ ha comunicado a su entorno más próximo su decisión de abandonar el banquillo tras el último partido de la temporada, un punto final doloroso pero meditado. La gota que ha colmado el vaso ha sido su exclusión, una vez más, de la carrera por el banquillo del primer equipo, que finalmente ocupará Xabi Alonso.
Durante las últimas semanas, Raúl ha vivido con decepción cómo desde dentro del club se han filtrado nombres de posibles candidatos al puesto de Ancelotti, sin que el suyo estuviera nunca entre las principales opciones. Una señal inequívoca de que el sueño que ha perseguido desde 2018, cuando comenzó en los banquillos de La Fábrica, no iba a cumplirse.

Desencanto acumulado y adiós contenido
No es una decisión repentina. Dentro del club ha habido intentos de moverle la silla en otras ocasiones, especialmente cuando el equipo atravesaba rachas complicadas. Sin embargo, Raúl siempre se mantuvo firme, confiando en el proyecto, apostando por los suyos y rechazando ofertas de clubes como Sevilla o Villarreal.
Este viernes, en un encuentro informal con el equipo, el técnico comunicará oficialmente su marcha. Aún le queda por delante un último partido frente al Alcoyano, pero el adiós ya está escrito. La idea de continuar en el organigrama del club, donde tiene contrato como adjunto a la dirección general, es ahora remota. El descontento con las formas y la falta de respaldo real han pesado más que cualquier propuesta de despacho.

Legado formativo y un título europeo
El paso de Raúl por el banquillo del Castilla ha dejado huella. En seis temporadas, ha mantenido al filial compitiendo con solvencia, e incluso rozó el ascenso en 2023, cuando el Eldense frustró el sueño a escasos minutos del final. Pero su mayor logro llegó en 2020, al conquistar la Youth League, primer título continental juvenil del club, con jugadores como Arribas, Miguel Gutiérrez o Luis López.
A nivel formativo, su trabajo ha sido indiscutible: más de 55 millones generados en ventas de canteranos desde su llegada al filial, muchos de los cuales siguen vinculados al club mediante cláusulas de recompra o derechos de futuro.
Arbeloa toma el relevo
Con la marcha de Raúl, el elegido para continuar la labor en el filial será Álvaro Arbeloa. El exjugador blanco lleva años esperando este momento, tras su paso exitoso por el juvenil A. Conoce bien a la generación que ahora sube, lo que facilita una transición natural y sólida.

Se cierra así una etapa cargada de ilusión, trabajo y compromiso. Raúl González se va por la puerta de siempre: la del respeto, la discreción y la dignidad. El madridismo, aunque dolido, sabrá valorar con el tiempo el trabajo callado de uno de sus mayores símbolos.
