Kylian Mbappé tiene dos partidos más para igualar el récord goleador de Cristiano Ronaldo en el Real Madrid. Es un asunto que Xabi Alonso ha tratado de restar importancia, pero que está sobre la mesa y explica por qué el francés estuvo disponible en Talavera de la Reina pese a la acumulación de minutos y golpes recientes. Y lo aprovechó sumando un doblete en su registro anotador.
Con 58 goles en 2025, el delantero necesita un gol más para alcanzar los 59 que el portugués firmó en 2013, la cifra más alta registrada por un jugador blanco en un mismo año calendario.
El gran condicionante es el calendario: solo quedan un encuentro oficial antes del cierre del año. La visita del Sevilla en la jornada 18 de La Liga. Un margen mínimo para completar una gesta que parecía inalcanzable hace apenas unos meses.
Desde su llegada al Real Madrid, Mbappé ha ido elevando su nivel de forma constante. Acumula 71 goles en 82 partidos, además de nueve asistencias y dos títulos internacionales: la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental. Su estreno con la camiseta blanca, el 14 de agosto de 2024 ante el Atalanta, ya anticipó lo que vendría: un gol a los 68 minutos y una adaptación inmediata al ecosistema competitivo del club.
Hoy, Mbappé es una de las figuras indiscutibles del equipo. Su contrato hasta 2029 garantiza que el proyecto deportivo se construirá en torno a él durante varias temporadas. Con continuidad, regularidad y un entorno favorable, todo apunta a que seguirá ampliando registros y acercándose a marcas históricas que parecían intocables.
El propio Mbappé lo dejó claro hace tiempo: “Siempre he dicho que no tengo límites. Si puedo marcar 50 goles los voy a marcar, si puedo marcar más voy a marcar más, pero lo más importante es ganar títulos.” Esa ambición es la que lo mantiene en la pelea por un récord que solo Cristiano Ronaldo había logrado tocar. Ahora, con dos partidos por delante, el desafío está servido.