Rodrygo Goes atendió a The Guardian y recordó la eliminatoria que vivió contra el Manchester City y que lo catapultó al estrellato.
El futbolista brasileño quiso tener un recuerdo a la gran remontada que se vivió en el Bernabéu, historia del deporte rey, pero también recordó el 4-0 que se llevaron del Etihad Stadium en el curso pasado.
“Es una eliminatoria que nos trae buenos recuerdos, pero también malos. La verdad es que es un rival que queríamos evitar, aunque creo que ellos piensan lo mismo, no querrían jugar contra nosotros. El Manchester City es muy bueno, pero nuestro equipo también. Será bueno medirnos con ellos otra vez”.
Sobre su ascenso en la élite asegura que hay un encuentro marcado en rojo, el del City en la Decimocuarta: «Hoy en día, cuando me acerco al área, los defensas me tiran, me marcan, me observan… es algo frustrante porque ya nunca estoy libre, siempre hay alguien encima de mí. Aquel partido cambió muchas cosas en mi vida. Mi estatus en el fútbol cambió después de aquellos dos goles, la gente empezó a verme de otra manera. Aquellos dos goles fueron un salto en mi carrera”.
«Es el mejor equipo del mundo»
«Tuvo palabras para el Manchester City y dejó claro el respeto que hay a los citizens en el vestuario de Valdebebas: “Es el vigente campeón de la Liga de Campeones y los campeones del mundo. Ahora mismo es el mejor equipo del mundo, así es que les tenemos un respeto total».
«No tienen jugadores malos o de nivel medio, no hay jugadores que creas que puedas presionar porque no es muy bueno o pueda facilitar una ocasión. Saben controlar el balón y el partido. Juegan bonito, es un equipo difícil. Es irritante jugar contra ellos, pero confío en nuestro equipo”, comentó.
A Rodrygo le preguntaron por el interés del Liverpool en ficharle: «No hubo acuerdo porque yo no quise. Quería quedarme en el Santos aunque la oferta era muy buena, me prometían un buen camino en mi carrera, que terminaría mis estudios en Inglaterra mientras me preparaba para el fútbol europeo. Jugar en Europa siempre fue un sueño para mí, pero quise quedarme en el Santos y hacer algo histórico con el club. Y pasó, cumplí mi sueño de jugar para el Santos. Pero sí, es cierto, estuve a punto de irme al Liverpool”, deslizó.
