La cúpula del Real Madrid ya contempla un plan de emergencia, aunque la voluntad pública sea respaldar al actual entrenador. A pesar de la confianza en Xabi, los próximos partidos de Liga y Champions se antojan decisivos para el futuro inmediato del banquillo, elevando la presión a niveles insostenables.

El mensaje interno es claro: si la racha negativa culmina en una «catástrofe» deportiva (como perder el liderato y complicar la clasificación europea), la mente del presidente Florentino Pérez solo alberga una opción para tomar las riendas del equipo: Zinedine Zidane.

​El técnico francés, doble ganador de la Champions League con el club, es el único nombre que la directiva considera capaz de asumir una transición de emergencia. Su perfil es el ideal para un cambio de rumbo a mitad de temporada, pues no necesita adaptación, cuenta con la total autoridad del vestuario y, sobre todo, goza de la bendición inquebrantable de la presidencia.

Zidane, de este modo, asumiría el cargo de forma interina hasta final de temporada, siendo el «apagafuegos» perfecto para reconducir la situación.

Zidane con la Champions
Zidane sigue sin volver a los banquillos (Getty)

​El único apagafuegos posible: Zidane y el efecto inmediato en el vestuario

​La elección de Zinedine Zidane como sustituto es una garantía de estabilidad y éxitos probados. Ningún otro entrenador en el panorama actual podría asegurar la calma y el respeto inmediato de un vestuario plagado de estrellas. Su gestión de egos y su conocimiento del ADN del Real Madrid lo convierten en un candidato sin igual.

Esta situación de máxima alerta subraya la crítica situación deportiva que atraviesa el equipo, obligando a los despachos a mirar al pasado para asegurar el futuro. Aunque la esperanza es que Xabi revierta la dinámica y las especulaciones queden en nada, la figura de Zidane se cierne como una sombra poderosa sobre el banquillo. Los próximos encuentros, incluido el vital duelo contra el City en el Bernabéu, determinarán si el presidente debe activar o no el plan de emergencia que solo contempla la vuelta del héroe francés.