El partido en Portugal frente al Sporting de Braga ha tenido de todo. El Real Madrid ganó 1-2 y lo hizo ante unas condiciones que no suelen ser normales. Entre medias de una montaña en el Estádio Municial de Braga y ante la mirada de 30.000 espectadores que abarrotaron dichas gradas laterales y que fueron noticia.
Hubo presencia de Ultras Sur pidiendo la dimisión de Florentino Pérez y se vio como algunos seguidores, sin la certeza de si eran madridistas o del Braga, lanzaban bengalas al terreno de juego, algo que está prohibido por la UEFA.
Por otra parte, el césped estaba muy irregular debido a que en los últimos días ha llovido mucho en la ciudad de Braga. De hecho, el Madrid estaba muy preocupado por el estado del césped, tan pesado, y eso hace que haya riesgo de lesiones, lo cual preocupaba, dado que dentro de cuatro días se tiene que jugar el clásico ante el FC Barcelona. Al final del partido, Bellingham tuvo algunos problemas físicos debido a lo pesado que estaba el terreno de juego. El inglés ha acabado el partido un poco sobrecargado, pero no parece nada serio, según ha dicho Ancelotti en rueda de prensa. No tendrá ningún problema y podrá seguramente jugar el clásico del sábado en Montjuïc.
