Toni Freixa admitió, públicamente, la compra del vicepresidente de los árbitros, Enríquez Negreira.
«Llevas toda la razón, nos vimos obligados a pagar»
El exdirectivo del Barça, Toni Freixa, reconoció en «El Partidazo de la COPE» que el Barça pagó al vicepresidente de los árbitros para beneficiarse. Juanma Castaño comenzó preguntándole si le tenía miedo a los árbitros esta temporada, a lo que Freixa contestó que sí. Entonces Manolo Lama le replicó: «Menos cuando le pagabais a Negreira«, a lo que Toni Freixa respondió: «Ya, llevas toda la razón, Manolo. Nos vimos obligados a pagar al segundo del Comité Técnico de Árbitros para competir en igualdad de condiciones con el club que históricamente ha sido beneficiado, y todos sabemos de qué club se trata», en clara referencia al Real Madrid.
Lama contestó irónicamente: «Lo importante es reconocerlo, que habéis pagado». Freixa siguió justificándose, diciendo que el club se vio obligado a pagar para poder competir en igualdad. En ningún momento, Freixa mencionó directamente al Real Madrid, pero sus palabras fueron claras, utilizando la narrativa victimista habitual.
En lugar de avergonzarse por haber pagado al segundo del Comité de Árbitros, Enríquez Negreira, durante veinte años y con un pago de casi 8 millones de euros (al menos de lo que se sabe hasta ahora), Freixa se enorgullece e intenta justificarse. Este tipo de argumentos son inadmisibles, y resulta increíble que aún no se les haya impuesto ninguna sanción.
En cualquier otro país, ya estarían sancionados y descendidos de categoría. Basta con mirar los precedentes del Milan o la Juventus, que por menos fueron descendidos. Este tipo de situaciones contribuyen a que la Liga Española pierda credibilidad cada día, convirtiéndose en una vergüenza del fútbol mundial. Por el bien y la transparencia del fútbol español, se debe llegar hasta el fondo de esta cuestión, y quien deba pagar, que pague.
Además, resulta indignante que Toni Freixa tenga la osadía de decir que está mal lo que hicieron, pero que «se vieron obligados». Parece evidente que urge una reestructuración total de los estamentos del fútbol español, porque todo esto «huele cada día más podrido». Esta Liga ha perdido credibilidad a nivel mundial y se ha convertido en un motivo de vergüenza.
Foto: EFE