El Real Madrid remonta y golea al Dortmund en otra noche mágica en el Bernabéu; hat trick de Vinicius
El Real Madrid ganó 5-2 en otra noche que pasará a la historia de las grandes veladas en el Bernabéu. Vinicius Júnior anotó un hat trick y mostró de qué pasta está hecho a pocos días de medirse al Barça en el mismo escenario del encuentro. Tres goles y una remontada mágica para levantar un 0-2.
Carlo Ancelotti apuesta por el equipo de las mejores galas en la reedición de la pasada final de la Champions League. Los borussers, líderes de la Fase Liga de Copa de Europa hasta el momento, bien obligan a no guardar nada, pese a la cercanía del Clásico liguero. Por ello, Carletto apuesta por una alineación muy reconocible en la que únicamente cabían un par de dudas. El Bernabéu, como era de esperar en un partido así, también lució su traje engalanado para los partidazos europeos.
Con Thibaut Courtois en portería, línea defensiva formada por Lucas Vázquez, Éder Militao, Antonio Rüdiger y Ferland Mendy. En el centro del campo sale Modric, junto a Valverde y Jude Bellingham. Arriba, en el ataque, vuelven a repetir Kylian Mbappé y Vinicius Júnior, además de la entrada de Rodrygo Goes.
El partido empezó con tanteo para ambos y sin ocasiones demasiado destacables. Ambos equipos buscaban asentarse sobre el terreno de juego en los primeros 12 minutos y mantenían la mira puesta en Courtois y Kobel. Y no tenían que intervenir en esos acercamientos tímidos. El Dortmund se apoderó del esférico pasado ese primer tramo y solo se escuchaba el resonar de los cánticos borussers.
Y lo que se veía a venir se consumó en el minuto 29. Un error de toda la defensa o genialidad de Guirassy desmantelaba la presión de Rüdiger y Mendy dentro del área y habilitaba a Malen para anotar el 0-1 en el Bernabéu y desatar ese delirio del muro amarillo trasladado en lo más alto del coliseo madridista.
El Real Madrid iba empeorando su juego con el paso de los minutos y el Dortmund, cada vez con las ideas más claras, se atrevía a ponerse 0-2 en La Castellana por medio de Gittens tras una asistencia al palo largo de Courtois que fue obra de Malen y que fue medio gol, tal y como se lo agradeció en la celebración del tanto.
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El Bernabéu pedía reacción y lo intentaron en una doble ocasión muy desafortunada que salvó el poste de Kobel, por partida doble, y el propio guardameta de los de Sahin con una buena palomita para evitar que entrase la pelota. El Dortmund, pese a ello, seguía incisivo y probaba por medio de Brandt a Courtois. El belga respondía con una parada soberbia para sujetar el resultado y evitar que fuera a peor antes del descanso.
Tras el descanso no hubo ningún cambio, pero Carletto sí que empezaba a pensar en ello ya que movió a calentar a medio banquillo. En el campo, por momentos, se veían cosas distintas con una ocasión clara para Lucas Vázquez. Vinicius, entre medias, intentaba un par de disparos tirando la diagonal y el Dortmund, sabedor del resultado a favor, empezaba a jugar con el cronómetro ante la permisividad del colegiado. También lanzaba el contragolpe, por momentos, y lo intentaba con Malen en la sala de máquinas.
La magia del Bernabéu
El Bernabéu, como hemos dicho, es el de las grandes noches y el Real Madrid en Champions es otra cosa. En el 60′ marcó Rüdiger y en el 62′ marcó Vinicius Júnior para empatar la contienda y poner en llamas al madridismo. La magia del Bernabéu, el espíritu indomable, y se le caía el mundo encima a Nuri Sahin y a los que iban de amarillo en el rectángulo de juego. Dos fogonazos sirvieron.
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El encuentro se templó y eso era buena noticia para el Dortmund que en el 82′ pudo anotar el 2-3, pero se topó con un Courtois gigante, de nuevo, que aparecía cuando más se le necesitaba y reclamaba. Y de Courtois a Lucas Vázquez y al 3-2. Puro fútbol.
Poco tuvo que esperar el madridismo para certificar la remontada ya que en el minuto 86 marcaba Vinicius Júnior un contragolpe y enterraba las opciones del Borussia Dortmund demostrando quién manda en Europa. Al grito de «Balón de Oro», se despojaba de la camiseta y se daba un baño de masas en el Bernabéu. Y quedaba la pieza final del puzzle perfecto del «7» en otro recital de época.
En el tiempo de descuento anotaba su hat trick y reventaba el final del encuentro con un 5-2 que es un serio aviso a Europa. Hoy quedó demostrado de qué pasta está hecho el próximo Balón de Oro que se coronará en París el 28 de diciembre. 5-2 y a por el Barça.
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