Jesús Vallejo ya es historia del Real Madrid. El central aragonés pondrá fin a su etapa en el club blanco al expirar su contrato este verano. Sin renovación prevista y sin minutos bajo las órdenes de Carlo Ancelotti, la salida del jugador se considera una decisión natural dentro de la reestructuración que prepara el club de cara a la próxima temporada.
Vallejo, que llegó en 2016 procedente del Zaragoza, no ha conseguido asentarse nunca en la plantilla de forma continuada. Su paso por el equipo ha estado marcado por una cadena de cesiones (Eintracht Frankfurt, Wolverhampton, Granada) y problemas físicos que limitaron su evolución.

Un ciclo marcado por la irregularidad y la competencia
Con solo 31 partidos oficiales disputados en ocho años, su rol ha sido más simbólico que competitivo. A pesar de ello, Vallejo siempre mostró una actitud impecable, sin una sola declaración fuera de tono, respetando su rol dentro del vestuario y manteniendo el compromiso con el club hasta el último día.
Desde Valdebebas, la directiva considera que su salida se enmarca dentro de una lógica renovación de plantilla. El propio Ancelotti dejó de contar con él de forma progresiva, y la dirección deportiva considera que su salida libera espacio para nuevas incorporaciones y para el crecimiento de jugadores con mayor recorrido proyectado.
El defensa, que acaba contrato a sus 28 años, no ha comunicado aún cuál será su próximo destino, pero todo apunta a que buscará un nuevo proyecto donde recuperar sensaciones y minutos. En el Real Madrid, deja atrás una etapa irregular, aunque siempre será recordado por su profesionalismo y discreción.

