En medio de un homenaje cargado de emociones por la despedida de Luka Modrić y Carlo Ancelotti, la aparición de Ferland Mendy en el césped del Santiago Bernabéu dejó una imagen preocupante para el madridismo.
El lateral francés, vestido de calle, con muletas y una férula inmovilizadora en su pierna derecha, generó inquietud al dejar patente la gravedad de su lesión.

Mendy fue operado recientemente de una rotura del tendón proximal del recto anterior del cuádriceps derecho, una intervención quirúrgica que, según el parte médico oficial del Real Madrid, se llevó a cabo con éxito por el doctor Manuel Leyes, bajo la supervisión de los Servicios Médicos del club.
Un nuevo revés físico en el peor momento
La escena en el estadio fue clara: Mendy, visiblemente limitado en su movilidad, bajó al terreno de juego para acompañar al equipo y formar parte de una jornada tan simbólica como especial. Sin embargo, su estado físico volvió a encender las alarmas. El jugador francés no ha tenido continuidad plena desde su llegada y esta nueva lesión supone un duro golpe de cara al futuro inmediato.
Aunque el club no ha detallado los plazos de recuperación, se estima que el periodo de baja pueda ser de varios meses, lo que pone en duda su disponibilidad para el arranque de la próxima temporada e incluso su continuidad en el proyecto.

Ferland Mendy ha sido un defensor sólido cuando ha estado en plenitud, pero su historial médico ha sido una constante en los últimos cursos. Esta nueva lesión refuerza la sensación de que el club deberá tomar decisiones importantes respecto al lateral izquierdo en las próximas semanas. Ya está en camino Álvaro Carreras y habrá que ver qué decide hacer Xabi con el defensor galo.

