Cinco de los árbitros que más han perjudicado al Real Madrid se reunieron con el hijo de Negreira para «charlar».
Según Libertad Digital, ha tenido acceso a un informe del CTA que demuestra que cinco colegiados se reunían esporádicamente en un hotel con el hijo de Negreira, Javier Enríquez.
Los colegiados conversaban con él antes de los partidos. Los árbitros son Alberola Rojas, Gil Manzano, Hernández Hernández, Sánchez Martínez y Soto Grado, curiosamente los cinco colegiados que más han perjudicado al Real Madrid en las últimas temporadas. Casualidad o no, los cinco han reconocido que tenían contratado al hijo de Negreira como coach, y que le pagaban en dinero negro y sin facturas.
Además, les acompañaba en coches de lujo cuando les tocaba arbitrar en Barcelona y les llevaba a comer a un restaurante del clan Negreira. Lo contrataron porque era el hijo del jefe, a pesar de que algunos, como el presidente del comité de árbitros, Medina Cantalejo, decían que Negreira era uno que pasaba por allí.
Estas reuniones con el hijo de Negreira se produjeron bajo la presidencia de Luis Rubiales en la RFEF y se acabaron en 2018, curiosamente cuando el Barcelona dejó de pagarles. Cabe recordar que el Barcelona pagó durante 18 años 7,5 millones de euros al que fuera segundo del CTA, Enríquez Negreira.
No solo cobraban del equipo azulgrana, los Negreira, desde 1999 hasta 2018, la RFEF pagó 900.000 euros a Enríquez en concepto de trabajos para la federación y el comité de árbitros. De momento, el CTA solo reconoce el pago de 8.500 euros en concepto de dietas.
Un escándalo sin precedentes. Se tiene que llegar hasta el fondo de este asunto y, de probarse todo, que pague quien tenga que pagar. Cada día que pasa huele peor. Urge una limpieza total de la Federación Española de Fútbol y del estamento arbitral, porque esto está haciendo un daño irreparable al deporte español, que cada día está más bajo sospecha.