Nico Williams ha cerrado de manera definitiva el último intento del Barça por el fichaje. A través de un emotivo mensaje en la cuenta de X del Athletic Club.
El pequeño de los Williams ha confirmado su intención de permanecer en Bilbao y ha mostrado su compromiso con el club al serigrafiar su camiseta con el número 10, previamente ocupado por Iker Muniain.
Calabazas al Barça
El joven delantero ha compartido su entusiasmo y orgullo por poder llevar el número que en su día llevó Muniain, subrayando el significado especial que esto tiene para él. «Le pedí el 10 a ‘Muni’. Muy orgulloso de poder llevar este número y hacer historia como ha hecho él», confesó Williams, dejando claro que está ilusionado con el proyecto del Athletic Club.
Acaba de tumbar el último intento del Barça
Esta declaración llega después de las últimas noticias que apuntaban a un posible fichaje de Williams por el Barcelona. El club catalán había realizado un último intento por convencer al jugador de que se uniera a su plantilla, pero Williams ha optado por seguir formando parte del proyecto vasco, al que se muestra completamente comprometido.
Gesto de compañerismo
El mensaje de Williams también incluyó un gesto de compañerismo al entregar el número 11 a Álvaro Djaló. Esta decisión ha sido recibida con gran satisfacción por parte de los aficionados del club, quienes ven en Williams una pieza clave para el futuro del equipo. Enloquecidos, a su vez, por ese «no» al FC Barcelona, a Joan Laporta y a todos los voceros que proclamaban que llegaría una oferta final y que el jugador ya había dado el «sí».
Futuro en Bilbao
Con esta resolución, Nico Williams deja claro que su prioridad es el Athletic Club y su proyecto a largo plazo. Su decisión de quedarse y el emotivo tributo a Muniain reflejan un fuerte compromiso con el club y una determinación de seguir construyendo su carrera en Bilbao.